Tras convertirse a la edad de quince años, Hélène Mongin descubre a Santa Teresita en 1997. Después de licenciarse en Filosofía por la Sorbona, trabaja durante cuatro años en la librería de la Basílica de Nuestra Señora de las Victorias, el santuario tan querido para la familia Martin, y a continuación se instala en el año 2007 en Normandía para trabajar en la Oficina Central de Lisieux, al servicio de Santa Teresa del Niño Jesús. A través de sus escritos y de sus conferencias, Hélène Mongin se consagra a compartir su amor por la familia Martin.