El descubrimiento arqueológico de unos pergaminos muy antiguos, que se podrían atribuir a San Lucas, conduce a unos hechos enmarcados en la época de la destrucción del templo de Jerusalén.
El cruce de cartas entre Lucas, desde Antioquía, y su amigo Teófilo en Roma, nos abre un panorama, en parte conocido, de cómo transcurre la evangelización en aquel primer siglo de vida de la Iglesia. Las dificultades para transmitir las enseñanzas de Jesucristo, las persecuciones que se producen, sobre todo después de los graves acontecimientos en los años de Nerón, son preocupantes. Teófilo, colaborador cercano del emperador, tiene una familia raramente numerosa para las costumbres romanas, y toda su preocupación es cómo conseguir que sus hijos sean verdaderamente cristianos. Los sucesos se van complicando hasta que la tragedia ronda a este cristiano romano, siempre ayudado, a distancia por su amigo Lucas.
Otras novelas epistolares, "Los idus de marzo" -quizá de las más famosas-, "84 Charing Cross Road" o "Reflejos de Luna". De una sola carta "Un alma valerosa" o "Carta de una desconocida".
Edición | Editorial | Páginas | ISBN | Observaciones |
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2015 | Palabra |
250 |
84-9061-178-4 |
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Comentarios
~~En estos momentos en los
En estos momentos en los que en diversas zonas del planeta se persigue a muerte a los cristianos, el autor presenta, de modo epistolar y novelado, la historia de un cristiano, Teófilo, que sufre persecución precisamente por ser cristiano en la época posterior a Nerón, con Vespasiano: es condenado a muerte, y al cabo del tiempo le es conmutada la pena por el destierro, perdiendo todos sus bienes y reducido a la miseria.
La trama está bien desarrollada, aportando como telón de fondo importantísimo, , una cierta idea de cómo vivían los primeros cristianos su vocación, y la caridad que los unía y hacía fuertes frente a la hora de la incomprensión y desprecio e incluso llegando a persecuciones atroces. Presenta una visión de la doctrina evangélica: la vida, los hechos y dichos de Cristo, vistiéndolos de un ropaje humano fresco, atractivo, de testimonio de primera mano que realza la doctrina y da una idea de cómo los Apóstoles y los primeros cristianos viven y difunden la fe haciéndola asequible a todas las gentes.
Con prosa ágil, el autor, nos lleva de la mano a través de una época histórica crucial para el cristianismo, poniendo de manifiesto, eso sí de forma novelada y bien ambientada, una recreación de cómo los primeros seguidores de Cristo vivían su fe en medio de un clima paganizado.
Lucas, autor de las cartas, relata detalles de la vida de Cristo -verdadero argumento del relato-, de su madre y de los Apóstoles que no deja de ser una recreación espiritual y humana, muy humana de lo que debió ser el caminar con Cristo por tierras de Palestina. Lógicamente es un recurso narrativo que hace más cercana la persona y la doctrina de Cristo, que no deja de tener su interés marcando con viveza el relato. Esto no es óbice para que el lector, si es conocedor de los escritos evangélicos, conforme por sí mismo la idealización que aquí se presenta.