Álvaro es un escritor que cuando necesita dibujar la trama vuelve sus ojos a sus vecinos: un matrimonio de recién casados, con algún apuro económico, un jubilado y una portera. Para su sorpresa, lo que ha perseguido con tesón acaba cumpliéndose y el afán de representar un crimen real en la ficción le empuja a provocarlo en la vida real. Pero la realidad nunca es tan gobernable como una novela.