En este relato, poblado de personajes tiernos, cercanos y llenos de humor, una familia argentina se ve obligada a esconderse en una casa de campo en tiempos de la revolución peronista. La historia refleja el proceso de maduración y crecimiento en la vida que para los hijos del matrimonio supone la situación. Obligados a palpar el lado más crudo de la realidad, los niños van atesorando las enseñanzas paternas acerca del mundo y de las personas, en un afán intenso por no perder el norte en días de barbarie