A veces leemos libros que tan sólo nos sirven de entretenimiento en esos momentos ‘malos’ que todos tenemos y de los cuales huimos a través de la lectura. Pero otras cogemos un libro entre las manos, comenzamos a leer y… ¡sorpresa!
Un mundo nuevo de sensaciones, sentimientos, imágenes y personajes nos inundan descubriendo que estamos vivos.
Este libro es uno de ellos. Puede que nos sintamos identificados con Marcos, el protagonista, o soñemos con los paisajes tan maravillosamente descritos por el autor y nos veamos en la Taiga, Tuva: Asia; o nos encontremos viviendo con chamanes, pastores, caballos y la música compartiendo el día a día.