Leningrado. Antigua responsable de las Komsomol (juventudes comunistas) Estudió filosofía y radiotecnia. Como ella misma expone en el relato de su conversión, su juventud fue una muestra típica de lo que era capaz de producir el sistema ateo soviético, a excepción quizá de una cierta inquietud intelectual que sus estudios de filosofía le habían despertado. A los 26 años se convirtió al cristianismo. "Si alguien me pregunta -relata ella- qué significa para mí el retorno a Dios, qué es lo que esa conversión me ha hecho patente y cómo ha cambiado mi vida, puedo contestarle con toda sencillez y brevedad: lo significa todo. Todo ha cambiado en mí y a mí alrededor. Y, para decirlo con mayor precisión aún: mi vida empezó sólo después de haber encontrado a Dios". Pocos años después, en 1984, puso por escrito el relato de su conversión.
Funda con algunas amigas un movimiento feminista, MARIA, cuya originalidad consiste en ponerse bajo el patronazgo de la Madre de Dios. Vive exiliada en Francia.