Este trabajo aborda tres aspectos sobre la relación del cine con la historia. Primero ve el cine como un protagonista más de la historia. El segundo se refiere a las historias imperfectas: un repaso a algunas de las películas históricas que, según los historiadores, son falsas. Por último, se estudia qué tipo de sociedades dibujan las películas y qué realidad suponen: unas sociedades de cine.