La obra narra las aventuras ya clásicas de Juan Sebastián Elcano, Fernando de Magallanes (portugués), Miguel López de Legazpi (conquistador éste de las Filipinas) y Andrés de Urdaneta.
Los cuatro colaboraron en la expansión del Imperio, la lengua y la fe por todo el orbe, en tiempos de Carlos I de España y V de Alemania.
Quizás lo más destacable sea que Edward Rosset sabe salir airoso en los diálogos, todos creíbles, algo difícil de conseguir en un género tan complejo como la novela histórica, no sólo porque ceñirse a los hechos sea difícil sino porque la mentalidad contemporánea no nos permite acercarnos con facilidad a una reproducción de época.