La casita bajo tierra 2. La fiesta de primavera

Segundo episodio de la preciosa serie infantil “La casita bajo tierra”, en la que se recrean las características de los cuentos maravillosos de animales y de la que ya se han publicado los cinco primeros libros. Los relatos están protagonizados por los Zarzamora, una encantadora familia de liebres que viven en la Gran Encina situada en el valle de Rocadeliciosa. Siguiendo los rasgos del cuento clásico tradicional, los personajes están humanizados, pueden hablar y habitan en una confortable casita con todo tipo de comodidades: baño, cocina, chimenea, dormitorios… y un sótano muy especial, la famosa “casita bajo tierra”. Los Zarzamora forman una alegre familia numerosa compuesta por Sam, el padre, director del periódico local; Mirna, la madre, una artista de la carpintería; y sus tres revoltosos hijos, los trillizos Tom, Lena y Oli, de carácter muy diferente, pero siempre dispuestos a jugar.

En esta ocasión, tal y como indica el título, la trama se centra en la fiesta de cumpleaños de los trillizos, que es todo un acontecimiento familiar: habrá una gran merienda con la Tarta Especial de los Zarzamora, invitarán a todos sus amigos del valle y se divertirán con todo tipo de juegos. Pero, la mañana de la fiesta, Tom decide preparar una sorpresa él solo, por su cuenta, dejando de lado a sus hermanas. Estas, enfadadas, también tramarán una diversión cada una de ellas sin contar con la otra. Así, Tom se encierra en la Casita, Lena se marcha sola al bosque y la pequeña Oli, malhumorada, se queda en su habitación para pensar y pensar. Con este planteamiento, la fiesta podrá ser un rotundo éxito o un tremendo desastre: todo dependerá de la unión de la familia, de la colaboración de todos para afrontar los problemas  y de la ayuda y generosidad de los amigos y vecinos del valle.   

Con un estilo cuidado y un vocabulario rico, poético y lleno de luz, la escritora Catalina González Vilar narra una historia maravillosa y divertida sobre la familia, los amigos y el cuidado de la naturaleza. A este hermoso texto, se unen las espléndidas ilustraciones de Toni Galmés, llenas de color, minuciosas y cuidadas al detalle, que también recuerdan los magníficos dibujos de los cuentos tradicionales. Como comenta la ilustradora, le encantó este proyecto porque le recordaba a los cuentos ingleses sobre naturaleza y animales de Beatrix Potter y Jill Barklem. Con esta fuente de inspiración, sus ilustraciones, elaboradas con tinta y acuarela, son dibujos vivos, limpios y preciosistas que fomentan la creatividad y la fantasía de todos los lectores, pequeños y grandes.