Tutankamón. El descubrimiento de la tumba

Novela juvenil, basada en hechos reales, sobre el hallazgo de la tumba del faraón Tutankamón en 1922. Así pues, la obra se desarrolla en su totalidad en Egipto, pero está ambientada en dos épocas distintas: la primera se sitúa en la década de los años 20 del siglo pasado con el descubrimiento de la tumba por parte del arqueólogo Howard Carter, financiado por lord Carnavon; mientras que la segunda retrocede en el tiempo hasta el siglo XIV a. C. durante el reinado del propio Tutankamón, con el que se extinguió la XVIII dinastía faraónica del Nuevo Imperio. De esta manera, siguiendo las técnicas narrativas actuales, el lector puede optar por varias propuestas de lectura y, así, podrá leer la novela siguiendo el orden en el que aparecen los capítulos, de forma consecutiva, “o bien escoger leer primero los capítulos impares y posteriormente los pares, o al revés”.

Con esta obra, la autora, Maria Carme Roca (Barcelona, 1955), historiadora y filóloga, ha querido conmemorar el primer centenario de este famoso descubrimiento arqueológico, que se celebrará en noviembre de este año 2022. Efectivamente, tal y como se narra en la novela, el 3 de noviembre de 1922 se descubrió el primer peldaño de las escaleras que bajaban hasta esta tumba situada en el Valle de los Reyes, que había permanecido intacta y con la puerta sellada desde hacía más de tres mil años. Allí se descubrió el sarcófago del faraón en perfectas condiciones y un fabuloso tesoro formado por más de cinco mil piezas, que Carter tardó más de diez años en catalogar. El valor de los objetos hallados, los escasos datos sobre el período histórico, las supersticiones y la maldición que pesan sobre la apertura de la tumba, han creado un halo de misterio en torno a estos hechos que aún hoy se mantiene.

Por otra parte, tal y como se ha comentado, en esta novela juvenil hay una segunda trama que se remonta hasta el antiguo Egipto para conocer la vida de Tutankamón. El relato, que está muy bien documentado en todos los aspectos, presenta a un faraón-niño que accede al trono con unos nueve años y que se encuentra inmerso en intrigas y traiciones planeadas por su séquito más cercano. De constitución débil y con alguna malformación física, gobernó unos diez años y murió de forma prematura sin dejar descendencia: un personaje histórico al que la autora se acerca con respeto y cariño para hablar del amor y de la amistad, del gobierno y de la traición, de la enfermedad y del sufrimiento, de la muerte y de la inmortalidad. En conjunto, se trata de una obra muy interesante para adentrarse en la Historia, conocer datos objetivos y contrastados y, al mismo tiempo, imaginar espacios y personajes posibles llenos de vida y sentimientos.