El pueblo traicionado forma una estrecha unidad sobre todo con El regreso de las tropas del frente, y en él muestra Döblin un Berlín donde algunos habitantes viven en condiciones miserables, mientras otros saben sacar provecho de las oportunidades que la guerra ofrece a los comerciantes sin escrúpulos, a los pequeños y grandes estafadores, y también a los oportunistas políticos.