Momentos finales de la Belle Époque, la guerra de 1914 y años posteriores en Paris. El centro de la novela es una fiesta organizada por un modisto en la ciudad de la moda. Poiret quiere emular a las mil y una noche y presenta una nueva línea de perfumes inspirada en el Oriente. El espectáculo realmente fantasioso, el número de invitados y su categoría hacen de la fiesta algo distinto y muy por encima de cualquier otro acontecimiento. Se rueda lo que ocurre en ella con el reciente invento del cinematógrafo; se pintan las escenas y los personajes y está presente Marcel Proust.
Relato ambientado en Francia a principios del siglo XX, en un ambiente de frivolidad, muy bien escrito, pero que refleja a una sociedad vacía y enferma, en algunos aspectos no tan distinta de la de hoy en Europa.