Giorgia está pasando por un momento complicado, pues quiere encontrar a su madre biológica y la relación con sus padres adoptivos no es la mejor. Ellos, aconsejados por la psicóloga, le proponen realizar a pie un tramo del camino de la Vía Francígena. El camino será una revelación porque conocerá a otros adolescentes como ella, con sus propios problemas, aprenderá a entender a sus padres, descubrirá el amor y sobre todo realizará un viaje interior sanador gracias a la ayuda de unas cartas que un joven peregrino ha ido dejando en cada etapa para que ella las encuentre.