En el difícil estilo de los soliloquios que ya utilizó en otras ocasiones, Salisachs vuelve con una novela de su género, y vuelve con una obra maestra. Como en otras ocasiones dibuja a la perfección unos personajes que nos hablan de amores, desengaños, infidelidades y traiciones. Como en otras ocasiones traza toda una vida de una mujer casada y equivocada.