«Me llamo Wesley Jackson, tengo diecinueve años y mi canción favorita es Valencia. Supongo que tarde o temprano todo el mundo se busca una canción favorita. Yo sé que la mía es ésa porque no paro de cantarla ni de oírla, incluso dormido.» Con esta frase se abre Las Aventuras de Wesley Jackson, la novela que el ejército de los EE.UU. encargó a William Saroyan para dar una visión amable de la vida de las tropas americanas destacadas en la Segunda Guerra Mundial.