Quinto Licinio Cato ha conseguido la libertad a cambio del compromiso de servir en la legión; ninguno de sus compañeros parece seguro de que haya hecho un buen negocio. La implacable instrucción ala que le someten y las interminables marchas no parecen lo mas apetecible para un joven culto y refinado que pasó la niñez en el palacio imperial, pero tras dos semanas en el campamento y después de ser victima de crueles novatadas, parece listo para enfrentarse a bárbaros germanos e iniciar una gran carrera como optio.