Una imprevista tragedia familiar, que saca a la luz el secreto de la ilegitimidad de su nacimiento, deja a las hermanas Vanstone privadas de todo derecho a recibir su herencia. Solas, sin posición, sin fortuna, sin nombre, estas dos «hijas de nadie» afrontan con desigual talante su inesperado destino: mientras Norah, la mayor, lo acepta resignada, la menor, Magdalen, se rebela contra él y decide recuperar el legado al que su propia identidad, según descubre una vez despojada de ella, va inseparablemente unida.