Una ceremonia sutil, cómica y terrorífica de vejación y manipulaciones.
La mansión de los Lamb contiene todo lo necesario para el desastre. Su dueño es un tirano; un opresor de su mujer, de sus hijos, de su primo y de sus criados. Al mismo tiempo, el mayordomo y la cocinera, aliados contra sus subordinados, reflejan y caricaturizan el sistema de jerarquías y la hipocresía de su amo. Los niños no se quedan atrás, pues están dotados de toda la crueldad de la infancia. Jerarquías, crimen y humor negro en una de las mejores novelas de esta gigante de la literatura inglesa.