Andrei Makine nació en Siberia (1957). Doctor en Letras por la Universidad de Moscú, fue profesor de francés. Emigró a Francia y allí, como los editores no publicaban novelas en francés escritas por un extranjero, utilizó un artificio: reescribir sus novelas al ruso e inventarse un supuesto traductor al francés. La crítica elogió la calidad de la traducción. Con "El testamento francés", su cuarta novela, ganó los premios Goncourt y Médicis en 1995.