Ningún argumento mejor para avalar la seriedad y credibilidad de este Diccionario que el de estar preparado por el "Pontificio Instituto Oriental", de Roma, -Institución erigida para el estudio y promoción de las ciencias eclesiales orientales- y dirigido por el P. Edward G. Farrugia, S.J., ayudado por un conjunto privilegiado de profesores del P.I.O.