En 1845, cuando Irlanda está asolada por la hambruna, Eleazar se ve obligado a emigrar a América. Convencido de que su vida es un trasunto de la de Moisés, se lanza en pos de la tierra prometida.
Pastor protestante en un país de católicos, asesino a pesar de su talante pacífico, aventurero por la fuerza del destino, emprende un viaje a través del desierto y las montañas heladas.