Los tres relatos que conforman este espléndido libro tienen como denominadores comunes el espacio y el tiempo, pues transcurren en Jerusalén durante los últimos meses del mandato británico, período que Amos Oz vivió de niño. En La colina del Mal Consejo, una familia, formada por un veterinario, su mujer y su hijo, vive en uno de los nuevos barrios de las afueras de Jerusalén. Su tranquila vida se verá alterada cuando el matrimonio sea invitado a asistir a una fiesta organizada por el Alto Comisionado británico.