Gunnar Huttunen rechaza la normalidad, la mediocridad y la renuncia a los sueños. Cuando aparece en un pueblo de Laponia y decide poner en funcionamiento el viejo molino, los campesinos del lugar lo toman por un demente. Aunque, después, deberán rendirse a la evidencia del éxito de la empresa. Pero aquel extravagante individuo, capaz de encantar a los jóvenes del pueblo, revela un defecto que los hará reafirmarse en su primer diagnóstico: en los momentos de tristeza, Gunnar aúlla. Los campesinos lo encierran en un manicomio, pero nuestro héroe se batirá para defender su libertad.