Vida de Francis Chrisholm, joven escocés que sigue el camino del sacerdocio. Relato de su labor misionera en China a principios del siglo XX, un período de hambre, peste y guerra civil, donde el sacerdote pasará duros trabajos. Aunque desconcertante a veces, el protagonista de esta novela posee un alma recta, profunda humildad y una mezcla de energía y dulzura.