Semblanzas de personajes que hicieron lo posible por cambiar el rumbo de los acontecimientos: gobernantes como Salomón o Trajano; científicos como Copérnico o Servet; pensadores como Maimónides o Maquiavelo; nombres temidos como Almanzor o Gengis Khan; e historias que marcaron una época, como las de Tutankamón, Anastasia o Helen Keller.