Nos encontramos en Nueva York a finales de 1913. Ronald Tower, un miembro de la alta sociedad, acaba de abandonar el club donde el señor Van Hofen ofrece una multitudinaria fiesta, y es arrastrado al río Hudson. Al no aparecer su cuerpo es dado por muerto. La única pista del caso es el asombroso parecido de Tower con su amigo el senador Meiklejohn y el detective Clancy sospecha que el senador es, en realidad, la persona contra la que se pretendía atentar.