Dahl escribe una serie de historias junto a una breve reseña autobiográfica en la que explica cómo es que llegó a ser escritor y luego, cómo llegó a ser reconocido, pero sin ningún animo de exaltación personal. Narra su experiencia de trabajo con Walt Disney y su amistad con el ex presidente Roosvelt, de Estados Unidos. Entre los relatos cortos, se encuentra uno relacionado al hallazgo de un viejo tesoro romano en un campo de Inglaterra y otro relatoque cuenta la historia de un hombre que era capaz de ver sin utilizar los ojos.