Hay momentos en que la proverbial flema inglesa, cuyo ejemplar más depurado es Phileas Fogg, no podrá resistir la tentación de dar al tozudo policía Fix un puñetazo tan eficaz como flemático. Fogg, que ha apostado su fortuna a que dará la vuelta al mundo en 80 días, empleará todos los medios de locomoción a su alcance —y todos los obstáculos imaginables—: trenes, barcos, coches, y hasta un elefante y un trineo.