Con la visita de un condiscípulo a casa de un amigo, se produce un contraste de posición económica entre ambos que aparentemente todo parece normal, pero ante la prepotencia y fatuidad del visitante nuestro protagonista reacciona de una manera cobarde,no se enfrenta ante una situación de gran estupidez, sino que siente el tirón de los respetos humanos y lo que en e él se produce es un bajón de su autoestima,al final reconoce su error de una manera muy leal valorando que lo que él posee es de tenerlo en gran estimación.