Madame de Mauves

El autor defiende la ingenuidad y firmeza incorruptible de los americanos. Recuerda mucho a Middlemarch de Elliot, la diferencia es que James trata con ironía el moralismo puritano. La maestría en las descripciones tanto de las casas como de los paisajes franceses situan perfectamente el escenario del relato. James va perfilando un personaje del que tratará en muchas de sus novelas: la esposa que no permite que la manipulen, transformando su inocencia en experiencia y lucha con inteligencia hasta resolver los problemas de su vida matrimonial. Presenta de una forma única la moral y la psicología de los franceses, así como su propensión al adulterio.