¿Es el cristianismo un hecho histórico? ¿Podemos alcanzar alguna certeza sobre la figura de Jesús de Nazaret? Todo el que quiera tomar una posición razonada sobre el cristianismo debe antes responder a esta pregunta. Partiendo de las fuentes cristianas, judías y paganas, con un estilo riguroso y a la vez sencillo, Los orígenes históricos del cristianismo nos pone en contacto son el cristianismo real del siglo primero: el hombre Jesús de Nazaret, la primera difusión del cristianismo en Palestina y su posterior propagación por Asia Menor y Europa, las relaciones con el imperio romano… Una aproximación novedosa a una de las cuestiones más debatidas de la historia de la humanidad, verdadera piedra de toque para la razonabilidad actual del cristianismo.
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Esta lograda monografía sobre los orígenes históricos del cristianismo, es de esos libros "vaca" que salen de vez en cuando y que vale la pena leer con detenimiento. En esas páginas se ven reflejado los recientes hallazgos de la arqueología y de la historia crítica de los Evangelios. La clave de los estudios del arameo y las retraducciones del griego al arameo arrojan muchas pistas para comprender el texto Revelado. El Vaticano II animó a los exégetas católicos a trabajar y aquí se dan los frutos. Mientras, sigamos leyendo el libro de Benedicto XVI que tambioén presenta al Jesús histórico en conjunción con el Jesús de la fe.
Algunos podrán pensar que poco se puede decir de nuevo al hablar de los orígenes del cristianismo. Sin embargo los expertos saben que el avance en los conocimientos históricos en este ámbito tan importante, es grande. Los planteamientos en la investigación han cambiado de rumbo después de los tanteos racionalistas del siglo pasado que hablaban del Jesús histórico como de un personaje desconocido. Ahora se conoce mucho más y José Miguel García es sin duda un experto en el tema, que trata de modo habitual en sus clases en la universidad.
Con este nuevo título estamos ante un manual especialmente exigente. Un libro que da mucho más de lo que podría esperarse de 350 páginas. Es un libro extenso y exhaustivo como manual. No es un libro de investigación ni dirigido a eruditos. Es una obra para público amplio, ese público que ha oído o leído muchas ideas un tanto peregrinas y pseudo novelas históricas. Aquí está la respuesta a tantas incorrecciones.
La mayoría de los temas que se tratan se pueden encontrar en otros libros, pero este que nos ocupa tiene todos esos temas que desearíamos tener a mano: las diversas fuentes históricas, las diferencias entre unos y otros evangelios, y un análisis muy pormenorizado de los contenidos, completado todo ello con un estudio completo de la expansión del cristianismo en los primeros siglos.
Quizá se podría haber cuidado un poco la presentación en lo se refiere a la letra, que resulta pequeña y se hace un poco cansada la lectura. Además el tema normalmente pide más gráficos o mapas de mayor calidad, que normalmente sitúan mucho al lector.