La pequeña crónica de Ana Magdalena Bach

Magnífico relato sobre este gran músico, en buena parte gracias a la excelente labor que hace Ana Magdalena desde el gustoso servicio a su esposo, a quien admira como persona y músico. Muestra, quizá sin pretenderlo, que detrás de un gran hombre suele haber una mujer valiosa

Las dudas sobre su autoría tienen importancia, las traducciones al español son deficientes, y sin embargo es una obra deliciosa. Sí destaca que la autora vive en el mundo de la música y sabe de qué habla, de su trabajo diario; sabe qué es una familia dedicada a la música, como la J.S.Bach; es una mujer enamorada de su marido o por lo menos conoce bien esos sentimientos de amor y admiración por el genio, etc. Por tanto prefiero creer que fue escrita inicialment por Ana Magdalena y que después ha sido arreglada. No es un monumento literario pero sí una obra de sentido y sentimiento profundo.

Me gustaría poder aportar aquí datos más concretos pero recuerdo haber leído un artículo sobre la autoría de esta novela y es realmente increíble. Repito que no son datos firmes lo que aquí pongo: hablo de memoria. Resulta que la obra es de principios del XX y está escrita por una escritora inglesa. Es una novela histórica muy documentada (y realizada por una musicóloga cuyo nombre no recuerdo). La publicó en forma anónima para potenciar las sospechas sobre su autenticidad y hoy todavía persiste el malentendido porque los editores (en mi opinión deshonestamente) siguen publicándola como si no tuviera autor conocido o se tratara realmente de una obra de la segunda esposa de Bach. Si esto es así, como creo, ya veis que la historia es una mezcla de juego intelectual y de fraude. La obra no carece de mérito, pero no puede considerarse literalmente.

La primera impresión que tuve de este libro fue que está mal escrito. En realidad la versión que he leído está muy mal traducida. Aún así es evidente que quien escribe no es un literato consumado: es la mujer de un gran músico, profesional de la música también ella, pero no escritora. Dejando esto claro hay que decir que estas memorias de Ana Magdalena, segunda mujer de Juan Sebastián Bach, son una delicia. Muestran dos cosas fundamentales: a un hombre genial, su marido, y a una esposa excepcional. Es evidente que esto último ella no lo pretendía, pero quizá es el trasfondo más nítido del libro. Ella, como esposa apasionada, escribe con gran entusiasmo de Bach y, sus defectos, de los que también habla, los pasa muy por encima y con infinita comprensión. Nos pinta un Juan Sebastián genio de la música, dedicado toda su vida –salvo en algunas épocas cortas de su vida- a la música sacra. Siempre trabajando sobre los textos sagrados y los textos litúrgicos, su vida entera fue un empeño de cantar a Dios. Por eso su conocimiento de Dios era muy grande. Quizá por eso su afán principal fue ser un buen padre y un buen esposo. Por ese motivo dejó pasar las múltiples oportunidades que tuvo de viajar, darse a conocer, dar conciertos. Vivió la mayor parte de su vida en Leipzig, como maestro cantor, dando clases a jóvenes, y dedicándose incansablemente a componer música. Toda su vida viviendo muy cerca de Dios, su muerte, esperada, amada, no fue más que un encuentro feliz.