Bari, la princesa abandonada

Sok Yong nos presenta una novela sorprendente. Ambientada en Corea del norte, China e Inglaterra, y al hilo de un arraigado y sano sentido de la unidad familiar, narra la vida de Bari, la hija pequeña de una familia de siete hijas, que vive mil peripecias tratando de reunir la familia dispersada por el dictatorial régimen coreano.
El argumento fluye entre la realidad y el sueño, en el que Bari vive identificada con una Bari, princesa abandonada,  de una historia ancestral coreana.
En esta identificación que se realiza a través del trato con el mundo del más allá, el autor pone de relieve la situación de la sociedad norcoreana del finales del siglo XX y principios del XXI, con una hambruna y pobreza extremas. Hace constar la persecución que sufren los coreanos que pasan a China tratando de subsistir; las condiciones inhumanas, el maltrato y las vejaciones de que son objeto los que, en manos de mafias, tratan de emigrar clandestinamente a occidente; y las visicitudes que viven para no ser expatriados una vez en el país de destino, en este caso Inglaterra...
Y termina el relato aportando, al modo de moralina, una series de razones por las que en la actualidad se dan las guerras, los atentados, persecuciones, etc.
La historia está bien entretejida; la narración es ágil, alcanzando un armonía aceptable entre lo onírico y lo real.