La música de una vida

Los primeros meses de 1941 son tiempos difíciles para los habitantes de la Unión Soviética, pues al terror estalinista se unen los rumores de una pronta invasión nazi. Una tarde de mayo, un joven pianista moscovita, Alexei Berg, recibe el aviso de que no regrese a su casa, pues en una de sus incontables redadas, la policía del régimen ha detenido a sus padres, acusados de supuestos e intrincados delitos políticos, y le buscan también a él. Alexi tiene que huir precipitadamente a una aldea ucraniana donde unos parientes campesinos le esconden en un henil. Atrás quedan para el muchacho la calidez del hogar familiar, una prometedora carrera artística - dedicada a la música - y un primer amor de juventud, que ceden el paso a los horrores de la guerra. Al arrasar los alemanes la aldea, Alexei descubre, en una hondonada repleta de cadáveres de soldados rusos, que uno de éstos se parece mucho a él; decide suplantar su identidad y, con su nuevo nombre, se incorpora a las tropas soviéticas.

Ese cambio en su vida será sustantivo. Supondrá para él una permanente huida de sí mismo para interpretar el papel de un soldado más bien frío y con un gran nivel de autoridad. Poco a poco, los acontecimientos de su vida le llevan a encontrarse en situaciones en las que ha de luchar por pasar desapercibido, con la finalidad de que nadie encuentre su identidad real.