Sin duda alguna el cuento de Navidad es un
género clásico. Al fin y al cabo es el acontecimiento más portentoso, al tiempo
que amable, de la historia de los hombres. Y estos han querido cantar a su
creador que nace niño. La historia en sí misma es tan extraordinaria que incita
al poeta, al literato, al escritor sagrado, a añadir su gotita de sensibilidad.
Podríamos citar muchas obras clásicas, como la
bien conocida de Dickens, Canción de Navidad, llevada
al cine. También libros para hacer oración, entre los cuales ha tenido un gran
éxito El Belén que puso Dios, de E.
Monasterio. Se han escrito novelas en torno al tiempo de Navidad como
style='mso-bidi-font-style:normal'>Noche de paz, de M.H.
Clark, o la más reciente de Anne Perry,
Una visita navideña, en la que las
fiestas no son más que un excusa literaria. Podríamos citar cientos, y para un
repaso más exhaustivo recurriríamos a
Marta Rivera de la Cruz en sus Cuentos
de Navidad, que es una recopilación de clásicos.
Entre publicaciones más recientes me han
sorprendido tres por sus respectivos autores. El cuento de Auggie Wren,
de P. Auster, y
style='mso-bidi-font-style:normal'>Barioná, el hijo del trueno, de J-P. Sartre,
publicados en el 2003 y 2004, respectivamente, y Ángela y el Niño Jesús, de F. McCourt, de
este mismo año, son historias navideñas tiernas y emotivas en plumas inesperadas.
¿Cómo es posible que personajes declaradamente ateos, o notoriamente
iconoclastas y escépticos, sean capaces de dedicar sus mentes literarias a un
fenómeno esencialmente religioso? No es algo que encuentre fácil explicación.
Seguramente no he leído líneas más bellas sobre el nacimiento de Jesús que las
de Sartre en la obra citada, obra que él mismo rechazó
y no quiso publicar, salvo que se expresara claramente su desacuerdo. El
rechazo de sí mismo, de su fe implícita, de su asombro de niño.
Las de Austen y
class=SpellE>McCourt son más superficiales y breves, pero manifiestan
ese espíritu profundo de la civilización occidental que celebra la Navidad,
como la fiesta más importante. Quizá para lamentarse de lo poco que le dice,
quizá para entristecerse por la falta de los seres queridos, pero siempre
trasluciendo piedad y admiración ante la historia más sublime jamás contada.
En esta línea nos encontramos con un ejemplo
magnífico y reciente, en este caso de un autor de quien sí podríamos esperarlo:
José Jiménez Lozano. Su Libro de
visitantes es una deliciosa narración, no el típico cuentecillo que se
despacha en cuatro páginas si no una auténtica recreación de la historia. Ya le
habíamos leído otras adaptaciones entre lo ficticio y la historia sagrada en
style='mso-bidi-font-style:normal'>Sara de Ur o
style='mso-bidi-font-style:normal'>El viaje de Jonás, de manera que no nos
ha extrañado encontrarnos con esta delicada y amable historia de los que fueron
a visitar al Niño Dios. Como en otras ocasiones no tiene ningún inconveniente
en inventarse personajes que aparecen casi como protagonistas. Y en este aire
de cuento navideño que se puede contar a los niños, adereza los hechos con unas
cuantas situaciones prodigiosas, como lo son que la burra de José, la asnilla
como él la llama, tome un protagonismo similar a la burra de
class=SpellE>Balaam, llegando, como esta, a hablar con los circunstantes
si el caso lo requiere.
Ameno y con ese manejo único que tiene de la
lengua castellana, escribe Jiménez Lozano un libro para releer, para
deleitarse, para meditar incluso, porque las consideraciones en torno al
nacimiento, junto con esa pizca de ficción amable, son fruto de una piedad
cristiana de siempre. Es de agradecer a Ediciones Encuentro la espléndida
edición dentro de su colección literaria.
Por último, y aunque no se trate de cuentos, no
quiero dejar de hacer mención de una obra de Ratzinger reeditada muy
oportunamente por Herder, La bendición de la Navidad, recopilación de sermones y homilías
sobre el Adviento y la Navidad. Reedición muy bien preparada con estupendas ilustraciones
en color, y con la predicación de quien mejor nos puede hablar del porqué de la
venida de Jesús al mundo: Benedicto XVI.
Ángel Cabrero Ugarte
Asociación Club del
Lector
Para leer
más:
Jiménez Lozano, J. (2007) Libro de visitantes, Madrid, Encuentro.
href="http://www.clubdellector.com/fichalibro.php?idlibro=6737">http://www.clubdellector.com/fichalibro.php?idlibro=6737
Ratzinger, J. (2007) La bendición de la Navidad,
Barcelon, Herder
href="http://www.clubdellector.com/fichalibro.php?idlibro=6795">http://www.clubdellector.com/fichalibro.php?idlibro=6795
style='font-size:12.0pt;font-family:"Times New Roman"'>Sartre
style='font-size:12.0pt;font-family:"Times New Roman"'>, J.P.
(2004) Barioná
style='mso-bidi-font-style:normal'>, el hijo del trueno, Madrid, Voz de
papel.
href="http://www.clubdellector.com/fichalibro.php?idlibro=2983">http://www.clubdellector.com/fichalibro.php?idlibro=2983
style='font-size:12.0pt;font-family:"Times New Roman"'>McCourt
style='font-size:12.0pt;font-family:"Times New Roman"'>, F. (2007)
style='mso-bidi-font-style:normal'>Ángela y el Niño Jesús, Barcelona,
class=SpellE>Maeva
href="http://www.clubdellector.com/fichalibro.php?idlibro=6765">http://www.clubdellector.com/fichalibro.php?idlibro=6765
style='font-size:12.0pt;font-family:"Times New Roman"'>Auster
style='font-size:12.0pt;font-family:"Times New Roman"'>, P. (2003)
style='mso-bidi-font-style:normal'>El cuento de Auggie
Wren, Madrid, Lumen.
href="http://www.clubdellector.com/fichalibro.php?idlibro=1809">http://www.clubdellector.com/fichalibro.php?idlibro=1809
Monasterio, E. (1996) El Belén que puso Dios, Madrid, Palabra.
href="http://www.clubdellector.com/fichalibro.php?idlibro=1832">http://www.clubdellector.com/fichalibro.php?idlibro=1832
Rivera de la Cruz, M. (2003)
style='mso-bidi-font-style:normal'>Cuentos de Navidad, Madrid,
class=SpellE>Espasa Calpe.
href="http://www.clubdellector.com/fichalibro.php?idlibro=1808">http://www.clubdellector.com/fichalibro.php?idlibro=1808