El fin de la alquimia

 

La crisis económica que comenzó en el 2007-2008 y cuyos efectos devastadores se hicieron sentir en el mundo entero y de la cual todavía hoy muchos países, entre otros el nuestro, apenas se está recuperando, ha sido objeto de múltiples análisis desde muy variados puntos de vista.

En esta ocasión, es el gobernador del Banco de Inglaterra, entre los años 2003 y 2013, el que aborda la cuestión, con solvencia y plenitud de conocimientos científicos, económicos y políticos.

Mervyn King ha contrastado sus conclusiones y análisis con colegas y amigos que forman  las grandes cabezas del mundo económico y financiero, por lo que su análisis, además de acertado y profundo, es de toda solvencia y reconocido valor.

En primer lugar resulta necesario referirse a lo que Mr. King denomina los elementos claves para poder entender esta crisis y otras que pueden desarrollarse en el futuro, o que ya han comenzado. Son cuatro y su enunciado es claro y contundente: "Desequilibrio, es la ausencia de un estado de armonía o equilibrio entre las fuerzas que actúan en un sistema" (…). "Incertidumbre radical se refiere a una incertidumbre tan profunda que es imposible representar en futuro en términos de una lista exhaustiva y conocible de posibles escenarios a los cuales podemos asignar probabilidades" (…).  "El dilema del prisionero puede definirse como la dificultad de conseguir el mejor resultado posible cuando existen obstáculos para la cooperación". (…). "La confianza  es el ingrediente que hace que una economía funcione" (29-30).

Las consecuencias de la crisis entre 2008 y 2009 fueron, como recordamos demasiado bien, devastadoras: "hubo un hundimiento de la confianza y la producción en todo el mundo. El comercio mundial cayó más rápidamente que durante la Gran Depresión de los años treinta del siglo XX. Alrededor de diez millones de trabajos se perdieron en Estados Unidos y Europa" (61-62).

Evidentemente por el tamaño la concentración y el nivel de riesgo de los bancos había aumentado (146). Por eso dirá: "cuatro conceptos han recorrido este libro a fin de explicar la naturaleza de la alquimia financiera y las razones del actual desequilibrio de la economía mundial: desequilibrio, incertidumbre, el dilema del prisionero y la confianza. Es difícil pensar sobre dinero y banca, y sobre su función en la economía, salvo en esos términos" (421).

Y más adelante añade con gran seguridad y acierto: "Casi todas las crisis financieras empiezan con la creencia de que la provisión de más liquidez es la respuesta, sólo para que el tiempo revele que bajo la superficie hay problemas genuinos de solvencia".

 

José Carlos Martín de la Hoz

Mervyn King, El fin de la alquimia, Dinero, banca y el futuro de la economía global, ediciones Deusto, Barcelona 2016, 452 pp.