Presentamos la reedición en castellano de uno de los mejores ensayos del dramaturgo, novelista y premio nobel francés Romain Rolland (1866-1944), sobre las relaciones entre Goethe y Beethoven. Una obra que versa acerca de la música creada durante el romanticismo alemán que estaba dirigido al público culto europeo que sobrevivió a la segunda guerra mundial con la intención de ofrecer a los espíritus verdaderas esperanzas.
La traducción del texto alemán está más que realizada, coordinada, por el poeta y escritor, miembro de la generación del 27, el chileno Luis Cernuda quien realiza una traducción muy pegada al original, aunque dotada de una belleza literaria que embellece indudablemente el texto sin cambiarlo en absoluto con palabras que son: “verdaderos relámpagos del alma” (28).
Hablar de Beethoven es tratar del músico más genial del periodo, pero ponerlo en conjunción con Goethe, el dramaturgo más importante del momento, es traer a colación asimismo a tantos otros filósofos, novelistas y poetas de uno de los momentos más intensos de la historia de Europa. En efecto, es un tiempo donde abundan los verdaderos genios: Hölderlin, Hegel, Schelling, Fichte, Schiller, y tantos otros: “el principal objeto de este libro es recordar a los lectores franceses que el poeta más grande de la Europa moderna pertenece a la hermandad de la música. Es el río donde confluyen los afluentes gemelos con todas las aguas de la tierra” (11).
No falta en la composición del ensayo la búsqueda de abundante documentación y, por supuesto, la debida ambientación necesaria para poder interpretar no solo lo que dijeron uno del otro sino también los clamorosos silencios. Es más, el arma secreta de Goethe eran sus silencios sobre algún autor o sobre obras memorables (53).
Se aprende mucho del periodo leyendo este ensayo, por ejemplo, que Goethe no soportaba el ruido y en cambio gozaba como nadie de la música, lo que indudablemente resultaba contradictorio en ocasiones con las composiciones de Beethoven. “Beethoven se enfrentó en Berlín con un auditorio romántico y no artístico” (46). De hecho, Goethe, era tenido por un maestro indiscutible, pero “Aunque tuviera razón, la manera de tenerla era sencillamente intolerable” (48).
De todas formas, Goethe “nunca hubiera impedido la expansión artística de Beethoven” (79), aunque se terminaría alejando de él por el ruido (82) pues, aunque trabaja con música, no toda música le sirve para crear (88).
De hecho, en el mundo de Goethe, cuando “El Mesías de Haendel” entra en su esfera, y se apodera de su oído, cubrirá dos facetas fundamentales para Goethe, como son indudablemente: la “necesidad y la libertad” (92).
Finalmente, la obra culminará con riguroso estudio del epistolario la joven Bettina enamorada perdidamente del anciano Goethe quien se cansa prontamente de ella pues le parece que: “Es una carga sentirse tan necesario para otro (144).
José Carlos Martín de la Hoz
Romain Rolland, Goethe y Beethoven, ediciones Firmamento, Cádiz 2023, 223 pp.