El escritor y periodista Manuel Bru (Madrid 1963), delegado episcopal de catequesis de la Archidiócesis de Madrid, muy conocido por sus muchos trabajos en los medios de comunicación y, sobre todo, por sus años de servicio como informador religioso, y actualmente profesor en la Universidad eclesiástica de San Dámaso, se ha planteado en el grueso volumen que presentamos ahora, un interesante reto, tanto periodístico como humano.
Hablar en este libro de la Nueva Evangelización que planteó san Juan Pablo II en 1983 en Haití en un momento clave de su pontificado, con aquellos tres famosos adjetivos: “Nueva en su ardor, nueva en su método y nueva en sus expresiones”, es hablar en términos de real eficacia y por tanto del gran reto que planteó el Pontífice más extenso de todo el siglo XX.
Indudablemente, la Nueva Evangelización fue un éxito pues no solo movilizó la oración, el sacrificio y la ilusión apostólica de todo el pueblo cristiano, sino también de todas las diócesis del mundo y, sobre todo, de todas las instituciones de la Iglesia que acababan de actualizar sus estatutos con motivo del código de derecho canónico y del Concilio Vaticano II.
Precisamente, puedo abordarse la Nueva Evangelización porque no partíamos del Km 0, sino porque había muchas raíces cristianas en todos los pueblos y culturas de la civilización occidental y porque en todas partes habían recibido la visita directa o muy cercanamente de ese coloso en la fe que fue san Juan Pablo II.
Además, todas las iglesias particulares y muchas instituciones de la Iglesia escucharon de labios del Romano Pontífice la llamada universal a la santidad proclamada en el Concilio Vaticano II en las Constituciones “Lumen Gentium” y “Gaudium et spes”, de modo que la llamada a la nueva evangelización vino precedida por la llamada a una santidad personal y eclesial renovada.
Finalmente, la Nueva Evangelización fue un éxito porque toda esa pastoral de la santidad que Juan Pablo II pregonó por toda la tierra llegó a la par que se difundía y se vendían y se traducían millones de ejemplares del catecismo de la Iglesia católica. El segundo catecismo universal de la historia realizado en un clima de comunión eclesial y de unidad de la fe después del concilio doctrinalmente más agudo y capital de toda la historia de la teología.
Además, la nueva evangelización partió de un trabajo de ecumenismo muy serio y capilar con todos y cada una de las Iglesias separadas comenzando por los más cercanos a la unidad de la fe hasta con aquellos no creyentes y alejados con quienes solo nos unía el concepto de la dignidad de la persona humana.
José Carlos Martín de la Hoz
Manuel María Bru Alonso, ¿Ha fracasado la Nueva Evangelización? El desafío misionero de la acogida a cercanos, alejados y lejanos de la fe cristiana, ediciones San Pablo, Madrid 2024, 688 pp.