La experiencia común

Una de las mejores maneras de expresar el importante y fecundo diálogo entre los hombres de la cultura, lo ha logrado Ediciones Encuentro al titular este trabajo que ahora presentamos, acerca de la importante y fecunda obra del profesor Giuseppe Capograssi, eminente jurista y filósofo del derecho italiano fallecido ya hace algunos años, en el siglo pasado, (1889-1956), pero cuya pensamiento y estela todavía es continuada por sus discípulos y sigue siendo luz para el encuentro y la búsqueda serena de la verdad.

Efectivamente es “experiencia común” muchas de las afirmaciones que realiza el eminente jurista italiano a lo largo del libro que el lector tiene entre sus manos, pero es preciso añadir la importancia de escribir la “experiencia común”, en lo que estamos de acuerdo, en lo común de nuestros hallazgos, pues eso da aun mayor solidez a la investigación y mayor calor a los encuentros personales.

Un ejemplo significativo de la antropología y del modo de trabajar del profesor Capograssi es, indudablemente, su planteamiento acerca de la teoría del conocimiento, que filosóficamente puede parecer muy elemental pero que es interesante: “El hombre vive en la experiencia. Es más, su vida es experiencia y la experiencia no es sino el encuentro y el choque del hombre con la realidad, con toda la realidad” (49). A lo que añade después: “este choque entre una y otra realidad no es todo el conocimiento. El conocimiento humano es algo más que este choque entre dos realidades. Las dos realidades vivientes, cuando chocan, en cierto modo se advierten, advierten su choque y esta advertencia es su choque”. Así pues, podrá afirmar: “Conocer es discernir, en esta masa nocturna de apariencias brillantes, lo que es y lo que aparece, lo que es necesario y lo que es accidental, lo que es universal y lo que es particular, reconducir las realidades casuales, fragmentarias y dispersas a la unidad necesaria, conocer la necesidad de las cosas y sus relaciones necesarias” (50).

Un poco más adelante, se aventurará nuestro jurista un poco más y entrará en el debate actual con la filosofía, para afirmar con rotundidad lo que es la idea: “Esta pensabilidad de la cosa, la cosa como pensable, la cosa como inteligible, es la idea. La idea contiene precisamente la esencia de la cosa, es decir lo que es la vida de la cosa en su pureza y plenitud” (51).

Efectivamente, ante la dictadura durísima del relativismo moral, ético y metafísico imperante, se deben recuperar figurar como la de nuestro jurista italiano, pues para Capograssi la confianza en la razón y en el hombre en su búsqueda de la verdad resultan capitales, aunque su falta de herramientas filosóficas le fallen: “El sujeto se fía y la experiencia responde”. Enseguida anotará también la figura del engaño y de la mentira que acechan al hombre de hoy: “Todas las maldades de la vida y de la historia y todo el tejido de los engaños que es, solo en la superficie, la vida social, no han podido hacerle perder su fe en la verdades, que es como el elemento constructivo de su razón más profunda” (72)

José Carlos Martín de la Hoz

Giuseppe Capograssi, La experiencia común, ediciones Encuentro, Madrid 2020, 231 pp.