La Iglesia que vendrá

Al cumplirse el décimo aniversario del comienzo del pontificado del papa Francisco, el profesor de la Universidad Urbaniana de Roma y sacerdote de la diócesis de Milán, Armando Matteo (Catanzaro 1970), ha creído encontrar en el intenso magisterio del Papa una respuesta a los retos que formulaba el cardenal Martini en los últimos años de su vida, justo ahora que se celebra también el décimo aniversario de la muerte de Carlo María Martini.

El trabajo está basado en una larga entrevista concedida por el cardenal al padre Sporschill y a la periodista Federica Rossati Radice, veinte días antes de su muerte y publicada en el Corriere della Sera, el día de su muerte, el 1 de septiembre de 2014.

Ya desde las primeras páginas resalta el autor el tremendo análisis de Martini: “La Iglesia está cansada en la Europa del bienestar y en América. Nuestra cultura ha envejecido, nuestras iglesias son grandes, nuestras casas religiosas están vacías, el aparato burocrático de la Iglesia crece y nuestros ritos y nuestros vestidos son muy pomposos (...). nosotros nos encontramos como el joven rico que se entristeció cuando Jesús le llamó para convertirle en discípulo suyo” (11). Enseguida, añadirá Martini que ve la Iglesia parada desde hace 200 años. Atenazada ante la pregunta: “¿qué puedes hacer tú por la Iglesia?” y enseguida llegará la primera gran afirmación de este libro: “solo el amor vence al cansancio. Dios es amor” (13).

Hemos de referirnos a la caracterización del adulto cristiano de la sociedad del bienestar de Martini: “hombre de la libertad, de la posibilidad, del placer, de la experiencia, de la expansión, del crecimiento” (...). “la libertad de poder ser libres”. De ahí que se pueda decir que el dinero es tiempo: tiempo de vida extra, tiempo de placer extra” (28-29).

Efectivamente, toda la primera parte del trabajo consistirá en mostrar, con palabras de Martini, que la pastoral de la Iglesia está completamente periclitada pues las condiciones económicas y culturales han cambiado radicalmente. Ahí viene la propuesta del autor del libro buscando palabras de Martini y del papa Francisco: a una sociedad del placer y del consumo solo puede enfrentarse “la civilización del amor”. Finalmente, recordará el valor de la Tradición y, en concreto, recordará los encuentros e impactos de las almas con Dios de modo personal a lo largo de la historia: “sólo el amor puede salvar a los hombres y mujeres de hoy” (97).

La propuesta de Martini es que esa conversión llegará por tres canales. En primer lugar, por la meditación de la Palabra de Dios: una palabra que convierte, transforma y vivifica (105). Seguidamente, la escuela de la oración personal: “Únicamente desde el cuerpo orante del padre y la madre pueden nuestros pequeños interiorizar la presencia benefactora de un Dios que nos ama y se preocupa de nosotros” (111). En tercer lugar, “la Iglesia lugar de celebración” (113), de acogida a toda la comunidad: “espacio de auténtica comunión, de correspondencia, de participación (…) de contacto para todos con el Dios-Amor hecho presente en la eucaristía” (117).

José Carlos Martín de la Hoz

Armando Matteo, La Iglesia que vendrá. Reflexiones sobre la última entrevista a Carlo María Martini, PPC, Madrid 2024.