La revolución "Queer" en Aceprensa

Abre el número de la revista Aceprensa del mes de junio, con un artículo acerca de lo que el autor denomina la revolución queer. Es un trabajo clarificador y sintético sobre la ideología de género, que nos permite ciertas reflexiones. Según la ideología de género cada uno puede ser y ejercer según desee como hombre, mujer, los dos o ninguno; exacerbamiento de la libertad individual por encima de la naturaleza y de la misma biología. Pienso, luego existo; ¿qué pienso? que soy una mujer, luego actuaré como tal. La mujer no nace, se hace -afirma Simone de Beauvoir- pues pongámonos a ello por cualquier medio, incluso a través de las hormonas y la cirugía. Se trata, volvamos al artículo, de cuestionar la "heterosexualidad obligatoria", la alternativa binaria hombre-mujer, a la que se atribuye la perpetuación de un sistema patriarcal con perjuicio para élla.

El error al abordar la ideología de género reside en suponer que se basa en los deseos sexuales del sujeto, lo cual escandaliza a los bienpensantes. Desde un punto de vista psicológico la revolución queer se basa en el carácter del sujeto. Cada persona tiene un carácter, parte genético, parte educado, parte elegido y en él se integran desde las pasiones a los miedos del sujeto; la sexualidad y los actos derivados son consecuencia de ese carácter. Podríamos hablar de la negativa a asumir el comportamiento masculino o el deseo de ser tratado como una mujer por parte del varón, o de la voluntad de comportarse de forma masculina en la mujer, hasta el extremo en ambos casos de querer parecerlo físicamente: La voluntad de poseer, dominar, proteger, o tambien poner el ideal en la belleza física, suscitar admiración, etc ...

Alguien recordará la película Calígula, en la que el emperador romano posee al jefe de su guardia simplemente para que quede claro que es el emperador y puede hacerlo. La incorporación del sexo a las relaciones sociales facilita esa ambiguedad o nomadismo de quien se entrega a unos y a otros, en ocasiones simplemente para ser aceptado/a. No deja de ser curioso que se identifique al varón con el género dominante -patriarcal. se dice-, cuando existen esposas dominantes en el ámbito familiar. Diríamos que encontrar un equilibrio entre los derechos y aportaciones del hombre y la mujer en la vida familiar es lo sano, en tanto que el desequilibrio lleva a los hijos e hijas a rechazar los roles injustos, la concepción erróneamente aprendida de lo que suponen masculinidad y feminidad.

Un artículo breve sobre la reproducción asistida plantea el problema de los hijos concebidos a partir de donante de óvulos o de esperma; estos, en un momento determinado pueden preguntarse quién será ese misterioso donante del cual han heredado rasgos de carácter e incluso posibles enfermedades genéticas. El/la donante, que ha hecho entrega de sus gametos con el compromiso del anonimato, a través de medios técnicos o de una sentencia judicial puede encontrarse con que esa donación se ha hecho pública y que alguien a quien no conoce ni desea hacerlo le llama "papá". Si llevamos esta situación hasta el extremo, podrían hasta derivarse consecuencias jurídicas de esa donación.

De un artículo sobre el nuevo conservadurismo americano destacan dos afirmaciones. La primera señala cómo "los progresistas no soportan que otros piensen y vivan de forma diferente". Esta idea es clarificadora acerca de medidas tales como la prohibición de rezar en las escuelas que ha impuesto la jurisprudencia en los Estados Unidos, o, en España, la prohibición de cuestionar a los sujetos queer su opción de vida o la amenaza de no subvencionar en términos de igualdad los centros docentes que separan niños y niñas. En base a no se sabe qué argumentos -que terminan siendo ideológicos- se limita una libertad ejercida sin daño para nadie. Por el contrario, estamos en desacuerdo con la afirmación de que "los bienes que más aprecian los conservadores son la tradición, la familia o la religión". Tradiciones hay muchas, no todas acertadas, pero abundan los conservadores divorciados o que no han pasado por un templo en sus vidas. Ver, por ejemplo, la divertida película Una jaula de grillos.

Podemos mencionar un artículo acerca de la destreza lectora de los alumnos de primaria como índice de la calidad educativa. De éste solo nos conforta saber que en Suecia se está volviendo en la enseñanza, desde los instrumentos digitales al uso de los libros tradicionales. Nos cuestiona saber que el gusto por la lectura se desarrolla en aquellas niñas o  niños a los que, desde pequeños, se les han leído libros o contado historias. ¿Habré leído a mis hijos e hijas suficientes cuentos o me he limitado a llevarles a las actividades extraescolares y al inglés?, pero, por otra parte, ¿que historias para niños conozco?

De las reseñas de libros y películas nos interesa la publicación póstuma de un volumen con textos de Joseph Ratzinger/Benedicto XVI, que destaca la razonabilidad de la fe y la afirmación de que "el futuro de la Iglesia depende del vigor espiritual de las minorías creativas". Afirma el autor de la reseña que "el destinatario de este libro no es el creyente -o no solo-, sino toda persona con inquietudes intelectuales que busque algo más que titulares de prensa".

Aceprensa, junio 2023, Madrid.

Juan Ignacio Encabo Balbín