La transmisión del Nuevo Testamento

 

El profesor Ordinario de Sagrada Escritura de la Facultad de Teología de la Universidad de Navarra, Juan Chapa (Bilbao, 1956), lleva toda una vida dedicada al estudio e investigación de los manuscritos, papiros, códices y pergaminos, más antiguos que se conservan y, en donde se recogen los textos de la Sagrada Escritura. En esta ocasión, nos ofrece dentro de la riqueza de sus conocimientos, una visión muy completa del estado de la cuestión respecto del Nuevo Testamento. En concreto, esta obra se ofrece un completo estado de la cuestión y un breve tratado de los mecanismos de transmisión textual del Nuevo Testamento. Es decir, nos hablará de los manuscritos que se conservan, su grado de credibilidad, datación aproximada, contenidos, estructura, variaciones y, por tanto, realiza una completa valoración de la autoridad tanto científica como magisterial.

Precisamente, este es el gran objetivo de la colección “Biblioteca de estudios bíblicos” que dirige el Profesor Santiago Guijarro y en el que colaboran especialistas del mundo entero: aportar los descubrimientos realizados en su campo, fruto de años de investigación y estudio. Avances grandes o pequeños, pues en la Sagrada Escritura todo tiene valor, pues conocer la Biblia, meditar la Palabra de Dios y aprender a aplicarla a la vida y a la teología forma parte del ser del especialista en la Escritura Santa.

Deseamos llamar, en primer lugar, la atención del lector en la cuidada redacción de la introducción, donde el profesor Chapa ha consensado muchas de sus experiencias vitales y científicas, en su más amplio sentido: previas, concomitantes y consecuentes de sus estudios, pues lo que tiene delante no son manuscritos de una obra cualquiera de literatura antigua, sino la Escritura Santa, pues “esos textos estaban destinados a trasmitir un testimonio, más que a preservar un depósito de aquello que se debía creer: estaban orientados a ser palabra en voz alta, palabra para ser escuchada como cuando fue proclamada por primera vez”. Inmediatamente, añadirá unas importantes reflexiones y, esta es una de las claves de este trabajo: “los textos no se pueden separar de la comunidad de fe viva que los lee. En este sentido, el libro que el lector tiene en sus manos no se limita a cuestiones textuales e históricas, el enfoque es claramente teológico, como se puede deducir de los dos últimos capítulos. Quiere ser una reflexión sobre la autoridad que tiene el texto bíblico en la Iglesia” (13).

Recordemos que eran un pueblo de analfabetos que se aprendían la Escritura de memoria y terminaban por ser controladores del texto (207). Pues: “los textos eran para ser escuchados antes que para ser leídos”. Respecto a la autoridad: “el formato que se utilizó para este tipo de escritos -el códice- contribuyó en buena medida a ir determinando qué libros serían considerados autoritativos y cuales no”. A lo que añadirá: “los escritos forman parte de una tradición que no solo es textual. Es una tradición que surge con el acontecimiento Jesús y viene atestiguado parcialmente en unos textos que son inseparables de la comunidad de fe en que nacen, se proclaman y se trasmiten” (14).

José Carlos Martín de la Hoz

Juan Chapa, La trasmisión textual del Nuevo Testamento. Manuscritos, variantes y autoridad, ediciones Sígueme, Salamanca 2021, 250 pp.