Desde que en el siglo XVII se publicara La leyenda aurea de Santiago de Lavoragine y todos los hombres y mujeres cristianos fueran conminados a leer vidas de santos, edificantes hasta el extremo y capaces de impulsar a la juventud tras tan buenos ejemplos, no hemos parado.
Desde entonces se han ido sucediendo ediciones y ediciones. La última la de Alianza Editorial en 1990 en dos volúmenes rápidamente agotados, no sé si de lectores pero si en ventas, pues ya solo quedan ejemplares en las librerías de viejo y en ese gran instrumento llamado Amazon.
La investigadora del Consejo y de la Universidad de Harvard, María Elvira Roca, nos ofrece una teoría unificadora de todas las leyendas negras que ha habido en la historia sobre los grandes imperios: en primer lugar el romano, por años de duración, y profundidad, pues el derecho romano no solo lo unificó sino que fue asumido por el siguiente que fue el español y lo llevo hasta los confines de la tierra.
El español duró muchos siglos y ha sido el más extenso hasta el momento. En las tierras de Felipe II no se ponía el sol, estaba unido por la religión católica y por tanto construida sobre las tres bases: el evangelio de Jesucristo, el pensamiento griego y el derecho romano.
El imperio Ruso que se expandió a través primeo de los zares y luego del comunismo, un imperio de la falta de religión, de la sin religión que cayó por ser incapaz de motivar al hombre solo con el ateísmo y la sociedad sin clases.
El yankee que es el último, ya más cultural que político, pero con bases reales y de futuro; la globalización todavía tiene muchos parámetros americanos: creer en Dios aunque sea un Dios un poco lejano, en la libertad, en el libre mercado en la creatividad y en el power point del lenguaje y la cultura simple.
Al final las leyendas negras son denigratorias, llenas de lugares comunes y se combaten con honradez, dado lo mejor que el hombre tiene, que es el amor a Dios y a los demás, la honradez, el deseo de ayudar a una sociedad más justa y solidaria.
José Carlos Martín de la Hoz
María Elvira Roca Barea, Imperiofobia y leyenda negra. Roma, Rusia, Estados Unidos y el Imperio español, ed. Siuela, Madrid 2016, 474 pp.