Pensar la religión

El catedrático de la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona, el profesor Eugenio Trias (1942-2013), conocido como el filósofo y pensador del límite, dedica la obra que ahora presentamos a enfrentarse a la dura tradición del posmodernismo para echarle en cara el olvido de la religión y de la trascendencia en su deconstrucción del pensamiento moderno hasta dejarlo en un callejón sin salida: muy corto de alas.

En definitiva, desde aquellos autores a los que denomina contundentemente como los “maestros de la sospecha” como Marx, Hegel y Nietzsche (55), se ha ahondado en el desprecio y el olvido de la religión, aunque en realidad lo único que hicieron esos autores fue ser consecuentes con la ilustración deísta y enciclopedista en la que se llamaba a la religión “superstición” (69).

Precisamente por ser un pensador del límite y encontrar en la ontología del límite el concepto de trascendencia puede atreverse a recorrer la filosofía de la religión y la historia de la filosofía de la religión, hasta encontrar la clave para retomar el hilo de la búsqueda de la metafísica completa; la que considera la religión como una faceta importante del ser humano.

Para Eugenio Trias, el límite del hombre vendría como lo más extremo, es decir lo más parecido a la teología de la vocación y de la santidad para un cristiano. Llevar al extremo las capacidades de la voluntad y del entendimiento, es decir llegar al límite de lo humano, sirve indudablemente para apuntar firmemente a lo divino, a la vida más allá de la vida.

En esta interesante reflexión, Eugenio Trias se detendrá largamente en las relaciones espirituales entre Oriente y Occidente, no solo desde Focio hasta nuestros días (por lo que se refiere a la Iglesia católica) sino incluso en el modo do de reflexionar y de pensar teológicamente entre los dos extremos del antiguo imperio romano (61). Los problemas teológicos planteados en ambos lados, los enfoques de las cuestiones sin resolver, todo eso nos habla de la riqueza de la Revelación que Jesucristo nos ha traído con su persona, pero también del distinto modo de ver la religión según las ricas tradiciones

El profesor Trias muestra cómo en nuestros días y en ambientes muy generalizados de occidente, no solo del resto del mundo, hay un indudable regreso hacia la religión pues “el referente sagrado existe, insiste y resiste” (109).

El ataque de la modernidad y la posmodernidad al hecho religioso ha sido contundente y tenaz, y lo denomina Trias como “el tiempo de la gran ocultación” (148). Pero para Trias existe Dios en el límite y un Dios personal en el limite (151). De todas formas, el ataque de Nietzsche, un apasionado por la verdad (179), no le parece el peor: “la historia es ante todo historia simbólica, historia espiritual” (221).

José Carlos Martín de la Hoz

Eugenio Trias, Pensar la religión, Galaxia Gutenberg, Barcelona 2013, 223 pp.