Teoría monetaria y préstamos en precario

 

El Centro “Diego de Covarrubias” de Madrid, comprometido con el estudio de la Escuela de Salamanca del siglo XVI aplicado a la economía, precisamente ha impulsado la traducción, introducción y edición del célebre trabajo de la hispanista inglesa Marjorie Grice-Hutchinson (1909-2003) sobre la Escuela de Salamanca y, en concreto, sobre “la teoría monetaria española“, poniendo a la disposición de los estudiosos de la historia de la moral económica uno de los trabajos más importantes del siglo XX sobre la cuestión. La reedición ha sido presentada recientemente en la Universidad San Pablo-CEU de Madrid.

La introducción del profesor León Gómez Rivas, de la Universidad Europea de Madrid, recuerda que esta obra es una síntesis de la tesis doctoral que la estudiosa inglesa elaboró, defendió y publicó en la universidad de Oxford en 1952 y que desde entonces ha ido permeando en la historia de la economía y del pensamiento en la actual civilización occidental (11).

Efectivamente, tiene razón el profesor Perdices, catedrático de la Universidad Complutense, en su amplio estudio introductorio, cuando afirma que la escolástica de la escuela de Salamanca no solo no estaba enredada en menudencias ni disputas banales, sino que tenían un profundo realismo en sus materias de estudio: la conquista de América, el problema de los pobres, los límites del poder civil y por supuesto el crecimiento de la economía y su encauzamiento en desarrollo, inversión y prestamos, cuestiones capitales en su momento  y en la actualidad (25).

Indudablemente, nuestra autora presentó al mundo anglosajón, tanto en Inglaterra como en Estados Unidos y a las abiertas corrientes de pensamiento económico centroeuropeo, los textos de los autores de Salamanca y sus sucesores sobre la teoría del precio justo, el valor del dinero, y los préstamos en precario.

Mas importante aún que las ideas que nuestra autora sintetiza y extrae y ordena, son los propios textos que presenta como anejos a su obra, muchos de ellos traducidos del latín o del castellano antiguo y contextualizados de modo que puedan valorarse plenamente las ideas y, de ese modo, queden fijadas (26).

Asimismo, nos recuerda el catedrático Luis Perdices que la obra de la profesora inglesa pronto fue leída, comentada y citada por los grandes autores de ambos lados del atlántico e incluso llegó a España y a los grandes autores europeos y americanos de modo que la escuela de Salamanca fue conocida y valorada no solo en el ámbito teológico y jurídico, sino también en el de la historia de la economía (28-29).

Verdaderamente, tenía razón Keynes cuando alababa a estos escolásticos que propiciaron el desarrollo económico en Europa y la primera economía globalizada a lo largo del XVI y XVII, gracias a transformar una economía basada en la usura de los prestamistas judíos a un nuevo sistema conformado por miles de inversores que dinamizaron la economía con préstamos a bajo interés (70).

José Carlos Martín de la Hoz

Marjorie Grice-Hutchinson, La Escuela de Salamanca. Lecturas sobre teoría monetaria española, Unión editorial, y Centro Diego de Covarrubias Madrid 20922, 194 pp.