Atlas histórico de la América del descubrimiento

Por diversos motivos el descubrimiento de América, o el encuentro de culturas como dicen otros, es un gran desconocido para la mayoría de los estudiantes españoles. Si en otras épocas se había insistido en las gestas gloriosas de conquistadores y evangelizadores, siguió después un período de desmitificación que ha acabado con una general indiferencia e ignorancia. Tampoco las celebraciones del V Centenario en 1992 evitaron esa tendencia a olvidar uno de los episodios más apasionantes de España y, también decisivo para los pueblos de Latinoamérica.

A pesar de todo ello los referentes son continuos y, quien más quien menos, ha oído campanas, bien a favor bien en contra de una empresa que tuvo por principales agentes a españoles y portugueses y como afectados a los pobladores indígenas de aquellos territorios.

La editorial “Acento” ha lanzado una colección en la que se presentan de manera sintética grandes aspectos de la historia y sus personajes. Son una serie de libros en los que prima la información sobre el análisis, aunque nunca se puede dar la una sin el otro. Pero principalmente ofrecen información que da una primera impresión y una visión de conjunto del tema tratado. Es lo que ha conseguido González Ochoa en este libro. Probablemente su formación periodística le ha ayudado a la hora de seleccionar el abundante material y de ordenarlo con equilibrio. Se trata pues de una auténtica minienciclopedia sobre el Nuevo Mundo en el momento del desembarco de los españoles.

El autor parte de la situación en América antes de la arribada de los europeos y explica las diferentes culturas existentes (aztecas, mayas, olmecas e incas, principalmente), y después recorre cronológica y geográficamente toda la Colonización, empezando por los viajes de Cristóbal Colón hasta la Conquista de Filipinas.

En ese desarrollo no ha dejado de lado las cuestiones militares, culturales, de educación ni religiosas, así como tampoco las discusiones sobre la legitimidad de la Conquista que se produjeron entonces en España. Se trata de un libro que ofrece información concisa, pero de temas muy amplios, lo cual lo hace recomendable para estudiantes y como obra de consulta inmediata. La obra viene muy enriquecida con numerosos ilustraciones, mapas y planos, que acentúan su valor pedagógico. Hay que señalar que la obra se ciñe exclusivamente al siglo XVI, y por lo tanto algunos temas quedan fuera de su objetivo, como las reducciones que mantuvieron los jesuitas (llegados en 1607), en el Paraguay. El autor también muestra una especial sensibilidad acerca de los daños y desestructuración que ocasionó la llegada de los españoles a aquellas tierras, aunque no deja de hacer referencia también (un poco menos), a la esclavitud en que vivían numerosos pueblos y el sistema de sacrificios humanos que, en el caso del Imperio Azteca, era especialmente horrible.