Doce relatos en los que se mezclan recuerdos del pasado y crítica de aspectos de la sociedad de los años del franquismo y de hoy. La acción transcurre en parajes de Castilla, excepto en el último relato.
Son cuentos de la memoria recobrada, de los años medios, de esa Castilla desnuda y austera, donde vida y muerte componen la línea de un horizonte marcado por el tiempo y el destino. Son un canto a la prosa verdadera; a la palabra como andamiaje del arte; a la mágica capacidad de fabular desde el acontecer cotidiano. El retrato preciso, inquietante y memorable, de un mundo poblado de personajes dolientes, anónimos y, por ello, descarnadamente cercanos.
Comentarios
En estos relatos, se mezclan los recuerdos biográficos con la crítica, sobre todo de la España franquista, pero también de la actual, con especial atención a los políticos. Se desarrollan en lugares de Castilla, excepto el último, cuya acción pasa en la costa malagueña. Hay que destacar la calidad de la prosa, el autor mima el castellano y se agradece. En cuanto al contenido, hay relatos espléndidos como "Paris"; en otros, el trasfondo es más bien de desencanto, de escepticismo, con algunas referencias negativas sobre la Iglesia y sus ministros, como si todos fuerna hipócritas, y con comentarios caricaturescos sobre la práctica de la fe o sobre la moral cristiana, especialmente en relación con la sexualidad.