Jay Gatsby es un aristócrata de pasado confuso que da continuamente fiestas en su enorme mansión del West Egg cerca de Nueva York. Estamos en los felices años 20, cerca ya de la crisis del 29.
Edición | Editorial | Páginas | ISBN | Observaciones |
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1994 | Penguin Books |
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Título original: THE GREAT GATSBY |
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Novela que refleja
Novela que refleja plásticamente el ambiente de la sociedad pudiente americana durante los "felices" y "dorados" años veinte del siglo pasado. Queda bien dibujada su frivolidad , su superficialidad y falta siquiera de hasta un mínimo de sentido moral.
Visto así podría pensarse que el relato no tendría más valor que la plasmación banal de un "modus vivendi" un tanto desenfrenado; sin embargo, el autor, corona esta visión con una crítica, con tintes sarcásticos, que enmarca y da sentido a la obra.
Una alumna mía, muy
Una alumna mía, muy inteligente, muy buena persona y muy buena lectora, me dijo un día que ella solo compraba los libros que le habían gustado. Esta afirmación, a los contrarios a la existencia de bibliotecas hogareñas, les resultaba totalmente absurda. Pero lo he recordado al terminar este libro. Es sin duda uno de los libros que hay que tener y releer, porque contiene sabiduría de la vida y porque tiene una calidad literaria maravillosa. La superficialidad de casi todos los personajes que aparecen es típica de esos años antes de la gran crisis de los años 20, y es, en gran medida, lo que vemos en nuestra sociedad occidental, o al menos española. La frivolidad de la fiesta, del lujo, del dinero, es lo único que vale. El pobre Gatsby parecía no darse cuenta de que no tenía amigos, o sea, no tenía nada.
En "El gran Gatsby"
En "El gran Gatsby" Fitzgerald nos cuenta la historia de Jay y Daisy. Ellos son unos jóvenes enamorados cuando él es alistado para participar en la Gran Guerra europea. Acaba la contienda y, ante la falta de noticias, Daisy contrae matrimonio con el rico Tom Buchanan. Cuando Jay vuelve de Europa se entera de que Daisy no le ha esperado. Cree que ha sido porque él es pobre y piensa en amasar una gran fortuna con el fin de recuperar a la mujer a la que todavía ama. Pero el pasado no vuelve, y el reencuentro entre ambos terminará en desastre.
Nos encontramos ante una novela de tesis. Fitgerald quiere mostrarnos la diferencia que hay entre los ricos "de cuna" y los "nuevos ricos". Los primeros han heredado su dinero, creen que todo se les debe y menosprecian a los que no comparten su estatus. Los segundos, por el contrario, son unos trabajadores con éxito, pero trabajadores al fin y al cabo; valoran su dinero como algo que han obtenido por si mismos, pero no temen compartirlo. Tienen, sin embargo, un inconveniente y es que provocan la envidia de los que no han tenido la misma fortuna en la vida. En la novela, Tom Buchanan pertenece a la primera categoría y está acostumbrado a tenerlo todo; Gatsby; por el contrario, es millonario, pero necesita congraciarse con sus vecinos que le miran con suspicacia. Al final no logrará lo único que realmente desea: el amor, la estima y el respeto.
La novela tiene dos características que no me convencen. La primera es que está contada desde el desenlace, como las novelas de misterio. El autor nos presenta a Gatsby y sólo al final nos dirá quién es, cuál es su origen, qué busca. La segunda característica es consecuencia de la anterior: la mayor parte de la novela carece practicamente de argumento, es descriptiva, y es al final cuando los hechos se precipitan y confluyen unas historias que podrían haber dado más de si tratadas de otro modo; es cuando el lector descubre el valor de la novela y de unos personajes hasta ese momento anodinos; así la historia de Wilson y Myrtle, del dudoso Mr Wolsheim (un guiño antisemita del autor) o del enternecedor señor Gatz, padre de Gatsby. También el narrador, el joven Nick Carraways, volverá a su hogar en el Medio Oeste americano.
"El gran Gatsby" es una novela triste y, si queremos sacar una conclusión de ella, sería la de que la soledad es compañera frecuente del dinero.
Me abrumó un poco y no me
Me abrumó un poco y no me quedó claro a dónde quiere llegar el autor: ¿ Las consecuencias de una vida egoista y frívola?
Es la gran novela de la "era
Es la gran novela de la "era del Jazz", años de una juventud frenética y una madurez violenta. Jay Gatsby, el caballero que reina sobre West Egg, es arquetipo de esos años veinte que discurrieron en el gansterismo y la corrupción política organizada. Debajo de la fiesta sin tregua, de la soledad de Gatsby, late la convicción de que la euforia de los felices años veinte tendría su fin. Fitzgerald fue narrador del esplendor y anunciador del derrumbe. Consiguió con esta su obra más acabada.
Es una obra sólida, con personajes bien definidos, dentro de una sociedad en decadencia. Nick, el narrador, es un profesional universitario que se traslada al Este de EE.UU, a la zona de West Egg, en busca de un mejor porvenir vendiendo bonos. Se sitúa en una zona de ricos, aunque su casa es modesta. Conoce a su vecino, Gatsby, el protagonista, que enseguida le invita a sus fiestas. Nick acude, observa y nunca juzga. Para él esta costumbre de no juzgar es importante. Lleva impreso en su corazón lo que le dijo su padre: "Recuerda que no todo el mundo ha disfrutado de las facilidades que tú has tenido" (p.20, de la ed. Alfaguara). Daisy es su prima lejana, casada con Tom, al que conoció en la Universidad. En la zona conoce a Jordan Baker, famosa deportista, amiga de Daisy y Tom, con quien llega a tener una relación amistosa.
A lo largo de la novela, en medio de fiestas, cenas, chismes y encuentros late la premonición de que ese estado de las cosas no puede durar. Tom comenta en un momento dado: "la civilización se está desmoronando... Me siento terriblemente pesimista acerca de todo..." (p.26-27, ed. Alfaguara); hay recelo, desconfianza, y en el fondo un poso amargo de soledad. Tienen la sensación de que ya lo han visto todo, lo han probado todo: "... soy una mujer de mundo. ¡Dios mío, no sabes, hasta qué extremo soy una mujer de mundo!" (p.32)...
Tom tiene una amante, Myrtle, que vive con su marido, Wilson, un hombre enfermo y receloso, dueño de la gasolinera en una zona gris, repleta de cenizas. En realidad su relación lleva tiempo que va mal. Pero aunque están en la práctica separados no van a más, porque la mujer "es católica, y los católicos no aceptan el divordio" (p.49).
Gatsby, el protagonista, vive allí porque nunca superó que el amor de su vida de juventud, Daisy, se casara al fin con otro. Y está dispuesto a volverla a conquistar cueste lo que cueste. Para ello organiza constantemente fiestas a las que acuden cientos de gente, invitada o no, y que con frecuencia ni siquiera conocen al anfitrión... que, en el fondo tiene una profunda soledad, solo consolada, por su sueño acerca de su amor, y por la amistad con Nick que a la postre, será su único verdadero amigo. Es alucinante el grado de egoismo que llegará a su punto culmen al final de la obra.
Otra serie de personajes aparecen a lo largo de la narración; la mayoría extraños, frívolos, imagen de la superficialidad, criticones; también los hay con cierto sentido común. El mismo Wilson insiste a su mujer, repóchándole lo que está haciendo (que no sabe muy bien lo que es): "... le dije que podía engañarme a mí. Pero que no podrá engañar a Dios" (...) "Dios lo ve todo" (p.189)...
Como no podía ser de otra manera, el autor va describiendo en nueve capítulos, todo el acontecer, que acaba de mala manera.
La obra está muy bien escrita. Fitzgerald actúa de testigo de una época, en cierto modo con visos de autobiografía en algunos aspectos, y profeta de un final que llegará con la quiebra económica en EEUU al final de los años 20. El dinero es otra base en este contexto, que, como se ve, no lleva a la felicidad.
Pienso que es un libro interesante para leer en libro-forum, porque, por contraste, puedes sacar muchos aspectos enriquecedores.
El protagonista, Nick, es un abogado, vecino de Jay que va describiendo su personalidad arrolladora y su caída por ser fiel a su amor de siempre, Daisy, que ahora está casada con un hombre sin escrúpulos. No entendí todo, pero los americanismos no ensombrecen su calidad literaria. Llevado al cine con R. Redford como protagonista.