En esta novela, al catedrático de electrónica Ermanno Ismani le proponen unirse a un proyecto ultra secreto, tan secreto que ni siquiera los que le proponen unirse a él saben de qué va.
Ismani, al que pueden su curiosidad y un temor irresistible a que lo tomen por cobarde, así como los ánimos que le da su mujer, acaba aceptando y así se traslada junto con ella a la instalación experimental 36, donde, para no revelar mucho de la trama, sólo contaré que se encuentra a unos colegas jugando a ser Dios sin ser conscientes de sus propias limitaciones ni querer enfrentarse a sus verdaderas motivaciones, con lo que la cosa se complica rápidamente, y alguien tendrá que realizar un importante sacrificio para salvar la situación.
Es un libro corto y entretenido, que se lee rápidamente, y que además me recordó mucho a la forma de escribir cargada de ironía de Stanislaw Lem, mi autor favorito de todos los tiempos, con lo que me gustó doblemente.
Comentarios
El gran retrato, está por completo en la línea de esta fantasía alegórica. En ella se pueden ver puntos comunes con la atracción intrigante y ominosa del horizonte y la tensa espera en "El desierto de los Tártaros", de los enigmáticos y sobrecogedores montes de "Bárnabo de las montañas" y del misterio y la tensión psicológica de alguno de los cuentos de Los siete mensajeros y otros relatos. En este caso, se añade al tema de la narración la preocupación psicológica y filosófica ante la libertad humana, el amor y sus pasiones. La novela se presenta de una manera estudiadamente morosa, aunque no carente de intriga, ambientación y acción atractivas y sugerentes y avanza in crescendo para en su último tercio llegar a unas situaciones inquietantes y llenas de tensión, para abocar un final que mueve al asombro y la convicción.
Una gran novela; clara, atractiva, directa y profunda, que forma parte significativa de la obra fantástico-realista y alegórica de este interesante autor italiano. Y que podrá recordarse como "El desierto de los Tártaros" y alguno de sus más conseguidos relatos.
( de Ángel García Prieto )
El gran retrato es una inequívoca muestra más de la gran calidad y personalidad literaria de Dino Buzzati, y junto con El desierto de los Tártaros y Un amor, puede verse como parte de una suerte de trilogía. En El gran retrato encontramos un nuevo y magistral reflejo de la inquietud de Buzzati hacia la vida y su misterio esencial, que se entrelaza aquí con su visión del amor como obsesión, como condena y como salvación. El gran retrato es novela de planteamiento y argumento sumamente originales que cabría adscribir a un peculiar género de «ciencia ficción metafísica» o «ciencia ficción amorosa». Pero mejor que someterla a cualquier clasificación es decir que se trata de otra gran novela de Buzzati, en toda la extensión del término, inquietante, conmovedora, sugerente y enriquecedora.
Una gran historia y la manera de narrarla. Nos encontramos ante una obra que tiene por tema el mayor de los misterios; ni la filosofía ni la ciencia han sido capaces de abordar este tema con la audacia y el lirismo con el que lo hace Buzzati en esta pequeña joya. Un misterio se encierra en valle celosamente custodiado. Un misterio que se aloja también en cada uno de nosotros y que nos constituye.