Diciembre de 1941. Los bombardeos alemanes asolan las ciudades de Inglaterra y muchos niños son evacuados a la campiña. Los más enfermos y traumatizados son trasladados a hospitales especiales. Emmaline es una de esas niñas, pero ella es diferente, ya que posee algo de lo que carecen los demás. Un secreto que le permitirá encontrar el color en un mundo gris: "No voy a contárselo a nadie, ni a Benny, ni a Anna, ni a la hermana Constance. Mi secreto se esconde en los espejos que reflejan las elegantes habitaciones que antaño fueron el hogar de una princesa hermosa y que hoy habitamos nosotros".
Comentarios
Novela juvenil escrita en
Novela juvenil escrita en forma de diario por la protagonista Emmaline, una niña de doce años, que recuerda en algunos aspectos los relatos de este género como el famoso “Diario de Ana Frank”. Ambientada durante la Segunda Guerra Mundial, la acción se desarrolla en el hospital de Briar Hill para niños tuberculosos, situado a las afueras de Londres y atendido por las Hermanas de la Misericordia. Así pues, en gran parte, el relato está basado en hechos reales, ya que durante la guerra hubo realmente varios hospitales infantiles y pabellones de tuberculosos en funcionamiento, alejados de las ciudades. En pocas ocasiones, se permitía a los padres ir a visitar a sus hijos, siempre guardando la distancia y, a veces, separados por mamparas de cristal. Esta enfermedad se extendió sin remisión durante varios años, hasta que en la década de los 50, tras el desarrollo de las vacunas, se produjo un descenso notable.
Como narra la propia autora en una nota al final de la obra, la inspiración para escribir este libro tuvo su origen en un largo trayecto en coche para asistir a un congreso de bibliotecarios en Carolina de Norte. Mientras conducía, recordaba las lecturas que la habían marcado en su adolescencia como “El jardín secreto” y “Las crónicas de Narnia”, obras en las que se fusionan la realidad con los sueños, la historia y la fantasía, la oscuridad y el corazón. A esta idea primigenia, se unió la experiencia personal de su abuelo, que había sido piloto de las Fuerzas Aéreas de los Estados Unidos durante la SGM: durante más de un año estuvo prisionero en un campo de concentración alemán y allí comprobó la necesidad y la importancia de encontrar belleza en la oscuridad de la guerra, en la opresión y en el dolor. En este caso, la mirada limpia de una niña será capaz de combatir la oscuridad con su maravillosa imaginación.
Con un lenguaje poético cargado de simbolismo, se presentan los grandes temas que siempre perturban e inquietan al ser humano: la vida, la enfermedad y la muerte, recogidos en unas historias entrañables que hablan del dolor de la pérdida de los seres queridos, pero también de la superación a través de la fantasía, de la amistad y de la esperanza. Novela de final abierto (como afirma la propia autora) que deja así una puerta abierta a la esperanza y a la imaginación del lector: para pensar que Emmaline se puede curar de su enfermedad y ayudar a otros niños, para reconocer los valores y la auténtica personalidad de Thomas, o para creer que los caballos alados existen de verdad en la realidad, porque una niña puede hacer que sus sueños cobren vida.